212 Pedro R. Batista C.
llegada cada año, como para que los novatos se sintieran bienvenidos y bien hallados en el ámbito de la
Escuela.
g) Nuestros cursos estaban bien provistos, con pupitres para dos, de fabricación extranjera; con sus mesas ligeramente inclinadas, muy cómodos para escribir; y asientos que giraban para abrir y cerrar,
sobre armaduras de hierro; ligeramente curvados en los tablados de sus espaldares y de los mismos asientos. Paredes y biombos estaban cubiertos de grandes mapas geográficos de Proyección Mercator, mostrando los
continentes, los mares y las divisiones geográfico-políticas del mundo. El profesor Esperón, que de pasada por nuestro curso Preparatorio al retirarse cercana la hora del mediodía observaba la clase, intervenía
entusiasmado sobre cosas como estas que ponían en alto el prestigio científico de su nativa Francia y nos hablaba con fervor del Mercator. No sabemos si modernamente la enseñanza de la Geografía se detiene en este
detalle científico del estudio de los mapas geográficos y sobre la existencia de otros nuevos, como los de Proyección Polar que se exhiben en las oficinas de tráfico aéreo, a veces también llamados "mapas de la
edad del aire" y que muestran generalmente el Polo Norte en el centro de los mismos; o de los mapas de Proyección de "áreas interrumpidas" que se caracterizan por espacios vacíos en blanco entre los
Continentes.
En la moderna Geografía, se enseñan los diferentes usos que el desarrollo económico y los progresos del mundo actual dan a esos diversos mapas, así como las ventajas y desventajas que tienen unos
sobre los otros.
También nos hablaba el Profesor Esperón del famoso Péndulo de Foucault, por el cual este gran físico francés había hecho ante una nutrida concurrencia de hombres de ciencia, la demostración del
movimiento de rotación de la tierra. Ni en los textos ni en la exposición oral de los modernos cursos de Geografía se hace ahora mención del mismo, ni se explica su mecanismo, pero los estudiosos pueden ver (en
movimiento) una magnífica reproducción del aparato, levantado como un símbolo del equilibrio universal, a la entrada (lobby) del edificio de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la ciudad de New York, (45
Street y First Avenue).
Santiago a principió de Siglo 213
En nuestro Preparatorio de la Normal también teníamos sobre la mesa del Profesor globos sobre los cuales se nos hacía trabajar hallando
prácticamente longitudes y latitudes; cambios de hora; la comunicación entre los mares; las zonas ecuatoriales, templadas, tropicales y glaciales; además de las zonas horarias, cuyo conocimiento es actualmente tan
necesario como nunca antes a través de los viajes terrestres sobre vastos continentes como los de América y Europa, y de los viajes aéreos a Madrid que promueven de continuo las agencias de turismo internacional; y
muchos otros detalles que el estudiante suele ignorar o conoce solo de manera vaga e imprecisa en un mundo de grandes adelantos. Con frecuencia, estudiantes de término y aún de enseñanza Universitaria leen en la prensa
vernácula informaciones del servicio internacional que comienzan con la indicación de la hora expresada así: HORA DEL ESTE y pasan años leyendo las mismas palabras inadvertidos hasta un día cualquiera en que por alguna
circunstancia les precisa hacer la traducción a nuestra hora local, o en otros términos, retrotraer a la hora dominicana aquella que en cabeza la noticia transmitida por el cable internacional. Entonces se dan cuenta de
que solo poseían un conocimiento teórico o vago sobre la materia de la mutación o variación de las horas a través de los meridianos de la Tierra. En los Estados Unidos de Norteamérica, por ejemplo, donde se hace
necesario en la práctica frecuente y diaria del desenvolvimiento de la vida, en los diversos órdenes de actividades, no es simplemente teórica esta clase de conocimiento para la nación debido a la vastedad del
territorio norteamericano. Precisa al turista, al hombre de negocios y a todo el mundo la diferencia de hora entre diferentes ciudades y Estados de la Unión entre el Este y el Oeste. El mismo Presidente de los
Estados Unidos cuando dirige algún mensaje a la Nación, queriendo ser oído de viva voz en todo el Continente y en las posesiones de ultramar, habla por la radio y la televisión no antes de las 10 de la noche Hora del
Este, como la más apropiada, que en diverso grado, viene a resultar como si dijéramos entre 7 y 10 de la noche entre las diferentes localidades del país, para que todos puedan oírle. La enseñanza de la Geografía la
completábamos después en los cursos teóricos con más amplios estudios que aquellos puramente descriptivos de la naturaleza y de la vida hasta
214 Pedro R. Batista.
llegar al Hombre. En la General se
estudiaba cl contraste de las costumbres, la variedad de los países, su organización política, etc., abarcando la completa superficie de la Tierra, en lo universal; y en lo Particular se estudiaba además de la propia
nuestra (en la primaria) la Geografía de América, que en el Bachillerato, por ejemplo, seguía el texto en cuarta de unas 160 páginas, de Geografia Superior ilustrada de Appleton, e informaba completamente sobre cada
país, su situación, extensión, suelo, hidrografía, orografía, clima, descubrimiento, habitantes primitivos, exploradores, costas, división política, economía, producción, fauna, flora, etc. etc. con una ilustración
abundantísima, nítida, clara, atrayente y detallada de lugares, vistas, paisajes, ciudades, edificios, tipos y costumbres, etc. etc. Otros mapas sobre las paredes y biombos que dividían las aulas mostraban el
Hemisferio Celeste; o en Anatomía, los huesos, músculos, nervios y vasos sanguíneos; el completo aparato circulatorio y el digestivo; mapas zoológicos y botánicos en colores. Había abundante material pedagógico. h)
Tenía para la Física y la Química elemental que enseñaba el profesor don Jesús María de Peña, apropiados objetos e instrumentos para la objetivización de los elementos de ambas ciencias.
i) Había también un
planetario accionado por un manubrio, que mediante una serie de hilos de seda ponía en movimiento unas finísimas varillas de acero, que sostenían las esferoides representativas de nuestro sistema planetario, teniendo en
su centro la gran bola dorada que representaba al Sol. El profesor de la materia, don Alcibíades de Peña ponía énfasis en que siguiéramos atentamente el curso de los movimientos de rotación y traslación reproducidos por
el aparato y que además mostráramos con dibujos en la pizarra, marcando la posición inclinada de la Tierra, permanente e invariable de un ángulo de 23-1/2 grados sobre el plano de la elíptica; e interpelando acerca de
cuando ocurrían los cambios de estación. Teníamos que repetir en las sucesivas circunvalaciones, según la posición de la Tierra. Ahora es Verano! Ahora es Otoño! Ahora es Invierno!
Santiago a principios de siglo 215
Ahora es Primavera! Aquello era divertido y estimulante. Por la agilidad y entusiasmo que imprimía a la clase. j) Teníamos, además, en el patio unas barras de madera para
ejercicios gimnásticos, argollas y pesas de levantar. k) El uniforme de gala era de dril blanco con botones, insignias y las letras E. N. fabricaba en plata, extraída de monedas americanas de cincuenta centavos, a
expensas del estudiante, aquel de los mejores orfebres de la época, don Manueliquito Mota, establecido en una rancheta del Mercado; completaba el uniforme una cachucha blanco con visera negra de lustrado hule. 1) La
correcta formación de nuestros cuadros con sus vistosos uniformes marchaba con marcialidad, llevando a la cabeza de la tropa provista de las banderas Nacional y de la Normal, la batería de tambores y cornetas; y en
señaladas ocasiones era aplaudida en circunstancias tales como el desfile para el acto de la colocación de la primera piedra del edificio que comenzó la Respetable Logia Nuevo Mundo No. 5 en los barbechos de la falda de
"El Castillo", que es hoy la calle "Escalante", para un Manicomio que al final de cuentas vino a alojar en vez de los declarados enfermos mentales sostenidos por la caridad pública, al principal
Liceo de la ciudad, sostenido por el Estado. En la base de aquella primera piedra están enterradas botellas de los principales rones de la industria de ese tiempo, como se acostumbraba al poner primeras piedras, para
el eventual futuro en que las encontraran los excavadores arqueológicos del porvenir. Las paredes del edificio llegaron a cierta altura; pero se modificaron posteriormente para la construcción del indicado Liceo
"Ulises Fco. Espaillat". 11) En otra ocasión nuestros cuadros fueron transportados por el Ferrocarril a la ciudad de Moca, en ocasión de inaugurarse esa línea y el Viaducto, obras consideradas entonces de
extraordinaria grandeza y novedosas por la construcción de dicho Viaducto. m) Con nuestros marciales cuadros del Preparatorio de la Normal se formó en otra ocasión un "batallón de Suabos" que participó en
el primer extraordinario y dispendioso Carnaval que a base de una primera Reina elegida entre los
216 Pedro R. Batista
Clubes de la elite santiaguesa hizo época con diversos actos que se efectuaron
durante los tres días del Carnaval, terminando el último con una gran "batalla de flores" con simulados actos de "anarquismo", contra el "poder real". n) En Santiago a través de "El
Diario" se conocía la información extranjera servida por el Cable Francés, que daba cuenta del anarquismo en España, responsable por entonces de una bomba disparada sobre el coche en que iba la pareja nupcial del
joven Rey Alfonso XIII; y por ello sin duda, se reproducía en forma de graciosa ficción una de las inquietantes ideologías políticas en que se debatía el mundo. ñ) En la predicación cuaresmal iniciada al siguiente
día, Miércoles de Ceniza, cuando todavía repercutía la "batalla de flores" que había tenido lugar el Martes de Carnaval, la doctrina del anarquismo actualizada con la ficción carnavalesca debía ser
naturalmente incluída entre los temas del Primer Sermón. Expuesta como uno de los grandes males de las comunidades políticas europeas, el predicador abundo en consideraciones sobre la razonable distancia entre la
ficción y la realidad trágica del momento ideológico político y sus terroríficas acciones, definiéndolo como diabólico y tiránico contra toda forma de gobierno; y poniendo de manifiesto las inquietudes que causaban en
el mundo. Era como decimos, "No juguéis con candela». o) De la palabra sagrada como fuente, se alimentaban en los días subsiguientes los círculos intelectuales; haciendo temas para comentario de los Parques y
los Clubes, donde se reunían algunos de ellos. El inglés Godwin cuyas teorías rechazaban toda idea de gobierno; el alemán Stirner, extremadamente individualista; el francés Prud'homme; el ruso Bakunin, una de las más
activas figuras entre los teorizantes del anarquismo; eran los temas en que alternaban algunos como el Padre Manuel Zenón Rodríguez, inclinado a la filosofía y la historia; don Pedro María Archambault, periodista activo
en el pronto enfoque de las corrientes del pensamiento moderno; don Salvador Cucurullo, erudito hombre de ideas moderadas; licenciado Jafet D. Hernández, muy visible entre la élite intelectual; el Padre Rodrigo
Cervantes, don Francisco de Vargas; don Antonini Casta y
Santiago a principios de siglo 217
algunos más, se las entendían unos con otros en moderadas disquisiciones, que enmarcaban cómo era y cuáles eran,
además de la actividad literaria, algunas de las inquietudes intelectuales de aquel tiempo. p) La mesa de la esquina, en el rincón interior del café del Yaque, a la salida de la misa mayor, en días de domingo, era
también el palenque de las inquietudes intelectuales de la época; y en la calzada se agrupaban estudiantes junto a las barandas de medio cuerpo de ambas puertas de la esquina, que prestábamos atención a las razonadas
exposiciones de diverso carácter, histórico, filosófico, social, etc. q) Del socialismo que sólo se escribía en libros, a nadie podía ocurrírsele para aquella época en Santiago, a pesar de que ya maduraban en Europa
las incitaciones marxistas, que las teorías pasaran en el curso de unas décadas después, al campo de la acción, en capacidad de exportar revoluciones para América. El libro "América en fin de Siglo" de la
Baronesa de Wilson que había recorrido toda América mostrando la vivencia activa de sus pueblos diferentes, ni aun los revelaba como un sueño... pero de esos y otros movimientos, especialmente aquellos de carácter
puramente literarios y de crítica, a la cabeza de los cuales figuraba La Vega con simpática repercusión en Santiago, el maestro don Federico García Godoy, (don Fico) se alimentaba el progreso intelectual de las aulas,
complemento del auge alcanzado por la enseñanza del Bachillerato y la Normal. r) Nuestros exámenes comenzaban indefectiblemente en el mes de Julio, y debíamos presentarnos con los uniformes de gala. Eran exámenes
orales y los cursos eran llamados ante una nutrida comisión de caras extrañas que a veces presidían el Gobernador de Santiago, y entre quienes recordara la noble y respetable figura del general don Miguel A. Román Hijo:
los Síndicos que se alternaban por elección popular, don Cristóbal Perelló y don Ramón Antonio Polanco, ciudadanos de los más respetables en quienes reposaba la autoridad Municipal y del Gobierno Nacional; porque entre
ambos, el Municipio y el Estado, pagaban el servicio escolar. Desaparecían los biombos que separaban las aulas; y el local se convertía en un fastuoso salón, con infinidad de flores sobre largas mesas, con vistosas
mantelerías detrás de las
218 Pedro R. Batista C.
cuales tomaba asiento la Comitiva. El exámen adquiría singular carácter, pudiendo decirse que a la vez de la prueba de convalidación que sufría el alumno,
era también el momento en que se lucía el profesor, que dejaba sentada la muestra de sus dotes elevadas, para el noble ejercicio de su apostolado. A los que aprobábamos los cursos se nos entregaban en un gran día de las
calificaciones Certificados enmarcados en orlas artísticas del siguiente Tenor:
rr) Nosotros llegamos al Preparatorio de la Normal Práctica, directamente desde la Sala de Clases
Particulares de don Virgilio Martínez Reyna (supra No. 32, letra c), reforzada la enseñanza que impartía por nuestro Padre durante la prima noche de cada día (lunes a viernes) con ejercicio de escritura (Dictado y
Caligrafía) Nuestra letra ha variado después, sus antiguos rasgos característico de la Caligrafía Inglesa, (infra 126-a) a causa de 10 años de redacción (1926-1935) del Listín Diario (generalmente después de las labores
diurnas de escritorio tratándose de
* Léase Pedro R. en vez de A.
Santiago a principios de siglo 219
informaciones nocturnas manuscritas, sobre la marcha rápida en los propios talleres de composición).
s) Hacia 1909-1910 abandonamos la Normal y fuimos al Bachillerato. Condiscípulos y contemporáneos en el
Preparatorio, Primero y Segundo Práctico de la Normal fuimos entre otros: Tomás Pastoriza Valverde, Fernando Pizano, Rafael Díaz Niese, Federico Kimpping, Rafael Peña Salado, Carlos Hernández, Luis
Leonelo López, Jacinto Dumit, Isaías Franco Bidó (Pasu); Tavito Malagón; Domingo A. Rodríguez; Ramón Molina, Fernandito Morel, Armando Lora, Ml. Lora, Domingo Silverio, Ricardo Raposo, Ml. Beltrán, Ml.
Grullón R. O. y Eduardito Grullón R. O., Julio Camacho, Fello Benedicto, Pedro Pérez, Joaquín Hernández Díaz, Miguel Angel Goico, Octavio Goico, Lorenzo Muñoz, Enrique y Miguelito Valverde; Manfredo
Hernández; Fernando Morel Ml. Jiménez, Nomito y Servio Tulio Pichardo, Rafael Bonnelly García, que de pequeño en su vocación por las matemáticas, en trabajos manuales, imitó la mecánica empleada por las
"máquinas traganiqueles" que sin duda veía funcionar en el Colmado de Alfonso Aguayo, durante le servían algún helado. La verdad es que su imaginación le llevó a explicarnos más o menos comprensiblemente
entonces el mecanismo interior por el cual las máquinas dichas, soltaban a rato la plata, pero la mayoría de las
veces frustraban el tiro. 123.- Las Escuela de Bachilleres fundada en 1907 graduaba de Bachiller en Ciencias y Letras. Se inauguró bajo la Dirección del Profesor don Salvador Cucurullo, de cuya personalidad
sobresaliente en las ciencias y las letras, y como modelo viviente de las mayores virtudes dignas de un ciudadano del mundo, ya nos hemos ocupado antes. Los Profesores para los cuatro cursos, cargados de 10,
12 y más materias cada uno, muchas de ellas que parecían no de texto, sino obras de consulta para el Maestro, frente a las que más tarde han estado en uso en los programas del bachillerato en el país-, eran
igualmente autoridades especializadas en las materias que enseñaban. a) El texto de Aritmética Razonada era del propio profesor de la materia, don José Monserrate Camacho;
puertorriqueño de ascendencia española; escritor y Director 220 Pedro R. Batista C.
Propietario del Diario "LA RAZON" que editaba en la Imprenta de don Ulises Franco Bidó; él mismo seguía
en Algebra, Geometría Plana y del Espacio, el texto de Gardín; cuyas lecciones explicaba y ampliaba hasta de tres maneras suyas, diferentes, hasta darlas por bien sabido. Su bigotudo labio entonces mostraba sonreído
cierto goce interior y exclamaba con placentera satisfacción que nos contagiaba a todos, "entendido? borrego"
Jhe, Jhe, Jhe. En Geografía e historia de América Superior e Ilustrada de Appleton, la primera; y de Estébanez, la segunda-, así como en la Analogía y la Sintaxis- texto de Gramática de Bello y Cuervo- el
Profesor de las cuatro materias era don Marcelino Andino, también hispano-borincano quisqueyano de mucho afecto a Santiago; se usaba en la clase el método de la exposición de viva voz por el alumno y de la cátedra
de viva voz, más amplia e intensa por el Maestro. En Ciencias Naturales, Zoología, Botánica y Geología; lo mismo que en Física y Química, nuestro Profesor
don Ricardo Ramírez (supra No. 21) seguía los textos de Langleberg ampliados por consulta de otros texto y conocimientos propios suyos; Eran textos de auténticos autores, no de repetidores de éstos, como se han
visto después apadrinados por complaciente amiguismo. Edmundo Langleberg, por ejemplo, fue un gran naturalista francés y sus Manuales de Química, de Física, de Historia Natural (Zoología, Botánica, Geología)
por los que estudiábamos para el Bachillerato de Ciencias y Letras alcanzaron un número considerable de ediciones en francés y otras lenguas y formaban parte de los programas del Bachillerato francés. La Historia
de Santo Domingo en los completos cuatro tomos de José Gabriel García, estaba a cargo del consagrado de varias generaciones en el apostolado de la enseñanza, profesor don Sergio Hernández, exigente en cada
detalle con sus puntos y sus comas; ni antes, ni creo que después, nuestras Escuelas han enfatizado la enseñanza con verdadero sentido crítico de la Historia; y es casi ahora modernamente cuando en parte, la
frecuente traducción de autores Haitianos y ciertas obras de autores del país vecino, (Dr. Jean Price-Mars, Beaubruin Ardouin, Vandercour, Gerard M. Laurent y muchos otros) inclinan a la
Santiago a principio de siglo 221
intelectualidad dominicana hacia consideraciones críticas acerca de cuestiones antes aprendidas como verdad
dogmática entre nosotros. La Lógica, en manuscritos que se conservaban de las LECCIONES DEL SEÑOR HOSTOS; la Historia de la Civilización en tres Tomos, por Seynobos, en un solo curso; la Historia de la
Literatura, por Soldevilla; y todas las otras materias del Bachillerato, con sus Programas calcados en el Bachillerato Francés de la época, cuya lengua también se nos enseñaba, estaban servidos por consagrados
Maestros de larga vida profesional y experiencia Don Juan Ovidio Paulino enseñaba la Prosodia y la Ortología Castellana; don Rafael Reynoso Muñoz, las ciencias del Universo. astronómicas y
Física Matemática y nos daba "mucho quehacer" con un complejo y difícil problema intitulado "De los
Móviles", que figuraba entre los puntos del programa, entonces doble, de Examen Oral y Escrito de Cinco Temas, fijados por bolas como las de la Lotería, extraídas a la suerte, de entre un saco, en presencia de una
larga mesa de los Comisionados. En los exámenes escritos precisaba desarrollar a los menos tres Temas, en el lapso de una tanda de hasta cinco horas a lo más.
Santiago a principios de siglo 223
También en la Escuela de Bachilleres, así como en La Normal se expendían Certificados como este que
acreditaban en un gran día De Las Calificaciones, la aprobación de cada curso, al finalizar los años lectivos. Contenían los datos y referencias extraídos de los Registros Oficiales de la Escuela.- El Sistema, en vez de
progresar ha caído en desuso; a tal punto, que los escolares modernamente andan de la Ceca a la Meca cuando necesitan proveerse de la prueba del pase de los Cursos; y los que es peor aún, fácilmente se
producen fraudes, que obligan a mantener alertas a las autoridades de Educación.
Nuestro Profesor Ricardo Ramírez (supra 21) Secretario de la Escuela de Bachilleres hizo una larga vida casi
hasta nuestros presentes días. Falleció en la ciudad Capital de la República el 20 de Febrero de 1974. Fue el primer Director de la Escuela Normal Práctica (desaparecida las de los cursos teóricos) en 1917 hasta 1926
cuando pasó a desempeñar la Intendencia de Enseñanza del Departamento Norte (Santiago, Puerto Plata y Montecristy). Ejerció el Magisterio durante 37 años. Cultivó mayormente el estudio de la Geología y de la
Palenteología de la Isla de Santo Domingo, lo que le llevó a la Dirección de esas Secciones del Instituto Geológico de la Universidad de Santo Domingo (1928-1964). Dejó algunos importantes trabajos científicos:
1.- "Descripción de algunos moluscos del Mioceno del valle del Cibao, de la República Dominicana". Publicado en un folleto por la Universidad de Santo Domingo en 1949.
2.- "Paleontología Dominicana", publicado en un folleto por la Universidad de Santo Domingo en 1955.
3.- "Léxico estratigráfico de la isla de Santo Domingo (Hispaniola) e islas adyacentes". Escrito en colaboración con el Dr. Jacques Puttelin, y el Dr. Robert Hoffstetter. Fue publicado este trabajo por el
"Centre National de la Recherche Cientifique, de París, Francia en 1956. 4.- "Breve bosquejo de la Geología de la República Dominicana, escrito en 1952. Permanece inédito.
5.- "Estudio de algunos moluscos fósiles del Mioceno de 1a República Dominicana", aún inédito. 6.-"Léxico estratigráfico de 'la República Dominicana". aún inédito.
Este último trabajo fue presentado al Primer Simposium para Evolución y Defensa de los Recursos Naturales de la República Dominicana, que celebró la Universidad de Santo Domingo en Octubre de 1958.
Reconociendo su valor científico fue recomendada su publicación junto con otros trabajos de otros autores, acogiéndose a lo dispuesto por la Resolución XLII del citado Simposio.
El profesor Ramírez fue miembro de las siguientes Instituciones Científicas extranjeras: "Paleontological Research Institution", de la ciudad de Ithaca, Estado de Nueva York, E.U. de A.
224 Pedro R. Batista
Sociedad Cubana de Historia Natural "Felipe Poey", de La Habana, Cuba. (Dr. Domingo O. Bergés-Bordas, Listin Diario 21-2-74).
b) Prosiguiendo, teníamos además la Asociación "CENTRO DE BACHILLERES" de los alumnos de la Escuela, paralela a la Asociación de Estudiantes de la Normal, que entre ambas corrían parejas en la
organización de actos culturales en que se ejercitaba la oratoria. El Doctor Casto Paradís, Sacerdote español,
filósofo erudito, periodista y combatiente, hablaba en todos los actos de Investidura y en ocasión de nuestras efemérides, así como en las Sesiones Literarias de los alumnos en dicho Centro; y además, abrió para
nosotros, Cursillos de Filosofía que no contenía el Programa del Bachillerato y que se exponían en los salones de la Sociedad "Amantes de la Luz".
c) Don Marcelino Andino escribió nuestro HIMNO DE LA ESCUELA DE BACHILLERES, de bellas estrofas, de las que recordamos solo algunos trozos de música y letra, pero dispersos: "La ciencia es patriotismo
honor es el saber, Ser ignorante y malo, Eso no debe ser". "El hombre que se estima por gloria ha de tener: huir de la ignorancia moderno Lucifer.
y del Coro:
"Cuando llama la voz de la Ciencia Siempre alerta debemos estar; Nunca debe dormir la Conciencia en su anhelo de Saber. (o de hallar la verdad.)
(Puesto que lo reproducimos de pura memoria, la responsabilidad de la métrica, puntuación y demás reglas del verso, y el verso mismo, es toda de nuestra memoria a través de los años).
d) Entre los condiscípulos y contemporáneos de los cursos del Bachillerato se hallaban María Giralt, Pura Concepción
Santiago a Principio de siglo 225
Santaella, Noemí Castellanos O; Angela Agustina Castellanos Ortega; María Teresa Castellanos Ortega; Clara Brache; Teófilo Morel Cordero, José Ramón Cordero Infante, (Pilino); Juan Tomás Lithgow, Numa
Almonte; Miguel Castaños, Paco Castaños, Enrique Chamberlain, Adriano y Domingo Reynoso, Generoso Mercado, Manuel Furcy y Ulises Bonnelly; Arístides Bonnelly (Toneno); Juan Ulises García, Rafael Camejo;
Isidro Bordas, Ernesto Bordas, Darío, Delio y Moisés Franco y Franco; Ramón Espaillat Genao, Pablo Asenjo, Frank André Méndez; Paco Benoit, Anselmo Benoit; Isidorito Rainieri; Panchito, Luis Sadí y
Federico Villanueva; José Valverde Leyba, Mario Valverde Quezada; Ricardo y Edilio Raposo, Luis Monsanto, Octacilio Páez; Andrés Perozo; Carlos Hernández, José Marmolejos; Toñito y José ML
Hernández, Luciano Hernández; Augusto Ortega, Chino Ortega, Alonso Castellanos, Ml. Ramón Castellanos, Llilo Cabral, Leví Camilo; Tuto Báez, José Morera, Mario. Morera Silverio; Fán Pérez; Agustín Concepción,
Pon Perelló, Luis Emilio Perelló; Pablo Perelló, Pío A. Franco, Félix Bergés, Rafael Bergés, Maximiliano Hernández, Francisco Antonio Hernández, Raimundo Hernández, Carlos Adriano Muñoz, Carlos Báez
González, Elpidio Ortega; Alberto Godoy; Tuto Báez, y muchos otros. e) La mayor parte de los Profesionales santiagueses de profesiones liberales salieron para la Universidad de
ambas Escuelas del Bachillerato y la Normal, como sus primeros y sucesivos frutos (1902-1975). 124.- LA ESCUELA SUPERIOR DE SEÑORITAS estaba dirigida por doña Herminia Zaleta de Gómez,
consagrada educadora cuya memoria reclama la perpetuidad de su nombre, que bien puede asignársele a una de nuestras aulas o planteles, como lo tienen sus compañeras en el Magisterio santiagués, Señorita Ercilia
Pepín, Srta. Rosa Sméster y todo el nutrido grupo realizador del primer auténtico movimiento feminista, enmarcado no en la prosecución de derechos civiles y políticos en paridad con el hombre, que ha venido
representado posteriormente, sino en el rendimiento de la labor más útil y provechosa que ha podido aportar la Mujer dominicana al país, cual es la labor docente y sus grandes emprendimientos en favor de la cultura y la
Educación.
226 Pedro R. Batista C.
Podríamos afirmar que el auténtico movimiento feminista que ha realizado la Mujer dominicana comenzó en su
dedicación al Magisterio. Doña Herminia Zaleta murió más que octogenaria en la Capital de la República, casi inválida en la primera casa de mampostería justo adonde terminaba el malecón y donde se dio el primer picazo
poco después de su fallecimiento para iniciar la apertura de la Avenida GEORGE WASHINGTON que partió desde allí hacia Oeste de la ciudad Capital.
125.- Shara Hungría, Fefita Sánchez, Shara Paulino, María Giralt, Mélida Giralt, Herminia Heureaux, Blanca Mascaró, Pura Concepción, Santaella, Clara y Margarita Esperón de Lasplaine, Juana García, Ana Josefa
Jiménez, Carmen Rodríguez, A. M. Aybar, Nini Contín, Ana Luisa Sagredo, Lolita de Félix, las hermanas Infante, y Cordero Infante, de Juan Luis; doña Elena Abreu Vda. Penzo, de aquel tiempo y muchas otras ya
antes mencionadas al hablar más adelante de diferentes establecimientos escolares y otros cuyos nombres escapan a nuestra memoria son auténticas representantes de la actividad docente en la ciudad de Santiago.
Son de las primeras que en Santiago debemos recordar en este aspecto del movimiento feminista, en este año consagrado a la Mujer Dominicana. (1975)
Pero, en términos generales y no obstante sus mejores logros, la Enseñanza Superior no fué ni ha sido después en muchos años, todo lo que habría podido ser sin las alternativas de los tiempos. Los Programas no fueron ni
han sido del todo completos. ¿Qué sabíamos, por ejemplo, de las literaturas extranjeras? -Quizás ahora acaso figure en la Enseñanza Superior la Historia de la Literatura Universal, comenzando por los estudios bíblicos.
Pero, además de la Española, ¿se imparte la enseñanza aun lo más somera de las literaturas de Francia, Alemania, Italia, Norteamérica y del Mundo? Qué sabe el estudiante avanzado o de término, acerca de los
períodos clásicos y de los movimientos posteriores que en las literaturas de esos pueblos informan de las varias tendencias, gustos e inspiraciones con que se consagraron las más grandes figuras del pensamiento, tan
solo siquiera en el siglo pasado?
Santiago a principio de Siglo 227
Mentiríamos si afirmáramos que ellas fueron, alguna vez materias de estudio en nuestras aulas. Aunque nuestra
primera escuela (l907-1910) que preparaba lo más completamente posib1e para el Bachillerato en Ciencias y Letras, tenía sus programas de cuatro cursos de diez meses cada uno. Estaban adaptados a los programas del
Bachillerato Francés, exceptuados algunos grupos de materias correspondientes a la enseñanza de la Filosofía y de las lenguas clásicas y extranjeras, menos el francés, indispensable como lo era para el ingreso a los
estudios profesionales en la Universidad; y una total reducción de las materias, le permitía también la reducción de los cursos, de ocho a solo cuatro.
Las materias de estudio se programaban a su vez, con obras de texto que ahondaban en conocimientos y requerían una labor seria, del estudiantado y del profesorado.
La prueba anual incluía el examen oral y el escrito. Por el primero, se establecía un diálogo, individualizado
entre el discípulo de turno y la comisión examinadora, que duraba por unidades de tiempo permisibles hasta el punto de llegar a saber el grado de preparación o conocimientos adquirido por el examinando. Por el
segundo, se reafirmaba, ampliaba y desarrollaba de manera más completa un temario de cinco puntos, extraídos a la suerte, por unos bolos numerados con que, se parcelaba el programa para el examen.
Se tomaba en cuenta no tan solo la superficialidad contra profundidad del conocimiento de la materia por el estudiante, sino además, la lógica en la demostración directa de sus proposiciónes y en su razonamiento.
Los profesores eran buenos, en toda la extensión de la palabra. El ambiente por igual. Estudiaba el Maestro, nunca dedicado a otra diferente actividad que no fuera su especial, única, seria y honesta consagración a la
enseñanza. Y no porque existieran incompatibilidades en las leyes para el desempeño de otras tareas, sino por cierto convencimiento moral, acerca de, la virtud del apostolado de las aulas.
Estudiaba también el alumno, acaso con la excepción del que por temperamento o educación fuera abúlico, negligente o díscolo; y en ese consorcio de buenas voluntades se producían años escolares muy fructíferos
para la adecuada formación de los graduandos.
228 Pedro R. Batista C.
A pesar de que bastaba la literatura Española, y el conocimiento de esta lengua y la francesa; y de que no
había lugar para más, aquellos programas ayudaban a la creación de cierto persistente hábito de conocimiento, fuera de las disciplinas del estudio destinadas a ser validadas por exámen cada año. Así, no fue en nuestras
aulas programadas, donde las literaturas del pasado, plenas de ideas y tendencias estéticas, alimentaron las fuentes de conocimiento de toda una brillante generación intelectual dominicana. Fue en la propia inquietud de
la juventud donde hallaron insospechados caminos los que alcanzaron las metas divinas del conocimiento.
Ese fue el camino de muchos antecesores nuestros que brillaron en diversas actividades del espíritu. Que
además de FORMACION ejercitaron inquietudes, y con éstas alcanzaron llegar a SER.
126.- Las Escuelas Primarias eran llamadas por números "Uno", "Dos" y "Tres", etc. o por nombres "San
Antonio", "San Rafael", etc., como todavía lo eran bastantes calles: "San Miguel", "San José", San Luis", "Santa Ana", etc.
a) Entre las principales, hemos de recordar en primer término, la NUESTRA DE PRIMERAS LETRAS, particular de la Srta. Altagracia Muñoz y hermanas María Dolores, Brígida y Eloísa Muñoz, en la acera Sur de
las hoy demolidas manzanas de la calle "La Barranca" a veinte pasos de la esquina "España" antigua "Comercio". (Supra 23 - b)
.
Aunque seguía los programas y nuevos métodos de la Ley General de Estudios, acusaba cierta inclinación a la
vieja Escuela de las postrimerías del siglo anterior, cuanto disciplina, inclusive el castigo corporal a base de una
ancha correa de cuatro picos; mantenía la enseñanza religiosa a la par con la enseñanza laica, sin renunciar en nada a la primera; representada en Santiago por antiguas Maestras muy gratamente recordadas y
frecuentemente mencionadas por nuestras profesoras con encendida gratitud: Doña Socorro Sánchez, hermana del co-Fundador de la República Gral Franciso del Rosario Sánchez; la "Maestra Noncita" y otras,
de quienes solo quedaba un grato recuerdo. La enseñanza comenzaba por el Alfabeto; y después de Abecedario en la Cartilla, venia la combinación de las letras y
Santiago a principios de siglo 229
sonidos. Se ponía énfasis, primero en aprender y leer letra por letra, separadamente y luego en combinar y pronunciar las silabas cortas de dos y luego de tres y más letras de las lecciones que venían en caracteres
gruesos, grandes, negros, con dibujos o laminitas al margen, del GATO, del ZORRO, etc., en las primeras páginas del libro Mantilla, con lo cual se progresaba gradualmente en la formación y lectura de las sílabas
hasta llegar a las palabras; más tarde frases y oraciones completas. El procedimiento ya en desuso era el siguiente: después de conocido el alfabeto, nombrando, pronunciando y
escribiendo separadamente los diversos tipos de letras usuales, (en caracteres de imprenta asi como cursivas en Mayúsculas y Minúsculas) y en la formación de cada sílaba; se pasaba al de las sílabas de cada palabra y
luego a la palabra entera: c, a, ca; s, a, Sa; Casa. Así se formaban desde una y dos o más sílabas un grande
número de palabras. Cuando se llegaba a leer "de corrido", cabal y completamente, no bastaba; había que
narrar o explicar lo que se leía y responder acertadamente al interrogatorio del Maestro sobre el asunto que se había leído.Parece que posteriormente, ya tarde, en el curso de este siglo, el método de la enseñanza de la
lectura ha sido descuidado en algunas partes, pues con frecuencia en el ambiente de vida actual, nos sorprende saber de muchísima gente que a veces inusitadamente alaban un discurso, un artículo de prensa o
exposiciones que han leído o tal vez oído por la radio y la televisión, e insisten en repetir "que es lo mejor que
se ha dicho" en tal cual materia, hasta el punto de movemos a preguntarles qué han dicho?, sobre qué? con lo que se embarazan grandemente y no logran explicarse. Por la misma causa mucha prensa y radio mal servidos
en la actualidad por reporteros que descuidaron aprender a leer y escribir correctamente, asimilando y comprendiendo la lectura, se deslustran con frecuencia estropeando gravemente el acento de las palabras, la
semántica o analogía de las mismas, y la sintaxis. En la enseñanza de la escritura, la Caligrafía y Ortografía, progresivamente se llegaba hasta la Clase del Dictado. Para la Caligrafía estaban en uso unos cuadernos, en
serie, del UNO al DOCE, de Caligrafía Inglesa, cuyo primer ejercicio que
230 Pedro R. Batista C.
llamábamos "el de los palotes", en el Cuaderno No. 1, comenzaba con rasgos y caracteres de líneas gruesas,
rectas, paralelas, inclinadas hacia la derecha, impresas en débil color para ser llenadas a toda tinta. A medida que se progresaba, la mano iba adquiriendo los movimientos adecuados para cursar las letras de figuras
redondas, más bien ovaladas y estilos claros y elegantes. La serie comprendía una colección de "planas" de
gran pureza, metodizadas racionalmente hasta enseñar a resolver todas las dificujtades de este tipo de letra. Forma, tamaño, distancia, inclinación, paralelismo, proporción entre la altura y la anchura de las letras,
redondez, en fin, dejaban el campo preparado para una escritura simétrica, uniforme. En posteriores años se introdujeron para el uso de las subsiguientes generaciones infantiles, nuevas caligrafías
en los programas de la enseñanza, a lo cual se debe indudablemente el hecho bien notorio de que entre todas las regiones del país, por alguna circunstancia desconocida por nosotros, solo en Azua varias generaciones
ostenten un tipo de letra uniforme, inconfundible, de letra cursiva, la más clara que se conoce, como también en Puerto Plata. Por eso también, no tenemos los dominicanos como lo tienen otros países un tipo de letra
gráficamente nacional. Los caracteres de letra de un francés, un alemán, un italiano, un inglés, un norteamericano son inconfundiblemente propios de ellos y se distinguen casi a primera vista.
Se enseñaba el Catecismo y la Doctrina Cristiana y se corregían las formas exteriores del persignado y la
genuflexión usuales en el curso de la liturgia, habida cuenta de que entonces como ahora, no solo entre la niñez también entre mucha gente adulta, se hace de estas prácticas gestos a veces musarañescos que no son mi
persignaciones ni reverencias, grandemente ridículas. Se ponía énfasis con algunos niños en extirpar algo que sigue siendo un vicio generalizado, por el cual muchas
gentes ahora en los barrios no aprenden los nombres de sus padres, ni los nombres completos de la familia a
que pertenecen, ni el de la calle y número de la casa donde viven, y solo alcanzan a decirse "hijo de fulana" (Pancha, Catalina) sin ninguna identificación[Inicio] [Anterior]
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