Santiago a principio de siglo 51
Campanas de los cuatro templos se oían en todo el ámbito, comprendida una extensa zona rural; y era
fácil distinguirlas por sus sonidos. Eran empleadas todos los días, como instrumentos necesarios de la vida civil y religiosa. Anunciaban así, entre otras cosas, las horas de 12 meridiano, 2, 3, 6 y 9 p.m. y 3 y 6
a.m. que incluían a la vez el toque de las horas Canónicas Mayores, de Laudes o Ave María y Vísperas u Oración; tocaban a rebato en caso de incendios; para llamar tres veces para cada misa, y cada otro acto del culto;
para advertir el momento de la Elevación en cada Misa y dar oportunidad a los moradores de la ciudad y campos vecinos de asociarse en pensamiento a las alabanzas del Señor; durante el canto del Te-Deum en los días
patrios; durante las procesiones recorrían las calles; a la entrada y la salida de los féretros en la iglesia y durante el responso final de las exequias funerales; a la salida del Viático hacia la morada de un enfermo
grave; para la celebración de Bautismos; a la llegada del Arzobispo Metropolitano o de alguna conspicua personalidad que homenajeaba la ciudad; a la muerte del Papa y del Arzobispo a razón de un doble cada hora (León
XIII y Monseñor Meriño). Actualmente ya casi ni suenan las Campanas. Las naves estaban provistas de bancos de caoba de estilo muy ligero, con patas y espaldares de balaustre, que a partir de la segunda década
comenzaron a cambiarse por los actuales, de estructura compacta y pesada; a la vez que por la caprichosa voluntad de los diferentes párrocos se han ido introduciendo reformas algunas lamentablemente infortunadas debido
a la incontrolada independencia del criterio de cada quien. Así han desaparecido las dos tribunas laterales en el Prebisterio, a la cabeza de la Nave Central para la Epístola y El Evangelio en las misas de revestidos,
como también las balautradas que protegían los altares de las tres naves; el Palpito en mitad de la nave central, para la predicación dominical y sermones de cuaresma etc.; aparte de la alteración llevada con su
reforma, a una obra de tanto arte como el altar Mayor original, el cual tenía su mayor altura, incluída su cruz, bajo el arco de mampostería sobre la pared
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que le sirve de fondo.
Delante del dicho altar y separado del mismo habían levantado una mesa de ladrillos con Sagrario y gradas en maderas pintadas de blanco con vetas grises imitando el mármol y sobre la cual se celebraba la Misa, pero con
la reforma que bajo la dirección del ingeniero Aguayo se hizo a la Iglesia después del terremoto de 1946, dicho aditamento fue destruído y restaurado el altar aunque solo en parte, pues se le dejó en la posición que
todavía actualmente tiene de mayor elevación, afuera y por delante del arco de la pared del fondo. En el Coro de la Iglesia actuaban de por vida don Lolo Ramos y su hijo don Rafael Ramos (infra No. 126 - letra d).
Tenían como un tesoro de la música religiosa el canto llano incomprensiblemente desechado en la moderna liturgia de nuestra Iglesia Católica Romana Don Lolo ya tenía una voz apagada por la longevidad de sus años, pero
sobresalía magnífico en el canto de algunas antífonas; que en otras, le suplantaban con más vigor algunas otras voces de jóvenes del coro. A su hijo don Rafael le gustaba una misa de Balmes para la Mayor, la mañana de
los domingos. Se reforzaba el coro para la ocasión de las Misas solemnes en días grandes para la Iglesia, en que actuaban además los hermanos Rafael y Pancholo Veloz: Godofredo Pichardo; Juan Pichardo y otros, de voces
clasificadas como tenor, arítono, bajo, etc. y en la parte instrumental dirigida por el Profesor y Organista don José Ovidio García Vila, actuaban entre otras, don Luis Cristian; el maestro Agustín; don Marcos de Luna.
Toda la música era esencialmente religiosa. Solo en el ofertorio de las misas solemnes, se oía música profana, pero música de dignidad y de grandeza; de elevación para el espíritu; mucha de ella extractada hasta de,
algunas grandes Operas del teatro italiano, alemán o francés, y Overturas de grandes Maestros apropiadas y cónsonas con la liturgia sagrada. En La Altagracia, dirigía el Coro el Maestro don Justiniano Jiménez y le
acompañaban algunos de sus hijos: sobresalientes en los cánticos a la Virgen. Coro "La flor del romero la más olorosa la más primorosa y de más rica miel. Santiago a principio de siglo 53
Solos- Oh! María! . . . etc. etc.
32.- La Quinta Manzana. del mismo Grupo B. del Cuarto Cuartel. a) Por la "Barranca" los Tolentino Genaro; los Tolentino Pichardo, (Juan). b) Por "Los
Portales" los Tuero, (Ramón); los Espaillat Franco, (Pedro María) el Prebistero José Manuel Román, Vicario Foráneo y cura Párroco de la iglesia mayor; los Bonnelly Fondeur, (Carlos Sully): Almacenista de
espíritu progresista, a quien se debió la organización de carácter cívico y gratuito del Cuerpo de Bomberos civiles; varias veces después, Presidente del Ayuntamiento; también organizó en cierto momento de inquietud y
alarma nacional debida a un supuesto deterioro de las relaciones dominico-haitianas, un batallón de voluntarios, dispuesto a marchar a la frontera entre los dos países. Falleció en 1923, a la sazón Presidente del
Ayuntamiento; y al acto oficial de su Sepelio tocó al autor de este libro, como jefe de la Policía que era entonces, encabezar con la oficialidad montada la muy concurrida y sentida manifestación de duelo público que
constituyó el entierro. Don Sully fue el progenitor del Lic. Rafael F. Bonnelly, Presidente de la República (1962). c) En la misma manzana y calle de "Los Portales" estaban además, los Canela, su
Tabaquería) uno de cuyos hilos llegaría a ser además de médico (Dr. Canela) un gran alpinista, explorador, con el Dr. Juan Bta. Pérez de los picos más altos de la Cordillera Central. En ese lugar se construyó después el
local del Club de Damas; seguíanle los Esperón de Lasplaine, (José Profesor de la Normal), casa sucesivamente ocupada también por los Creuets, (José, Sastre) y también por los Rodríguez, (Lic. Domingo Antonio, Juez de
la corte de apelación). durante sus años mozos. Habiéndonos facilitado su Un entusiasta y venerable caballero a quien faltaba su brazo derecho, cercenado residencia para la celebración de un reinado infantil, en el
que toda la élite de la época elegimos a la niña Ana Julia Bonnelly Fondeur y su Corte de otras siete preciosas niñas de la vecindad; en la prima noche de su baile de coronación don Domingo se fue al Teatro de Andrés
Cordero, antes dicho y a la salida de la comedia, llega a su casa e ingirió, de algunos dulces, golosinas y refrescos de la rumbosa fiesta, lo que parece haberle causado en la madrugada "pues a su edad ya no
cenaba" un derrame cerebral que le extinguió su vida. Su Sepelio por la tarde fue una de las más notables manifestaciones de sentimiento público de la sociedad Santiguesa
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Don
Domingo Antonio Rodríguez se distinguió en la vida pública sirviendo a la Nación desde tales posiciones como Secretario de Estado de Justicia; Presidente de la Suprema Corte y otras veces del Tribunal de Primera
Instancia de Santiago y como Juez de la Corte de Apelación. Miembro del Senado Consultor, los intelectuales de relieve en su época como Benigno Filomeno de Rojas.
d) Por "Las Rosas", un solar,
(donde se edificó después el Teatro ideal de Mario Schiffino); los Jáquez, (Virginia); los Pujols; (María); los Martínez Reyna y nuestra SALA DE CLASES PRIVADAS DE CURSOS PRIMARIOS, bajo la dirección del joven poeta,
político y combatiente don JOSE VIRGILIO MARTINEZ REYNA (infra No. 126, letra ñ). Un perseguido revolucionario contrario al régimen de los Rojos y de manifiesta vinculación con 108 azules, que varias veces se vió
compelido a abandonar la clase e huir por los patios hasta esconderse por breves días, en los que se le "arreglaba la cosa". Los políticos en veces actuaban con la tasa y la medida de los que aspiran a ser
justos. Perseguían a la ocasión de alguna denuncia que pronto se dilucidaba, y el perseguido quedaba en libertad, aunque "vigilado de cerca". Un grupo de comerciantes no adscritos a partidos políticos y
a quienes los gobernantes de turno les tenían respeto y consideración, como para no molestarlos por ello, favoreció a don Vergilio sosteniédole aquella Sala de clases. Eramos unos siete u ocho y por las noches, don
Virgilio tenía también a su cargo clases a domicilio a los hijos de los Almonte Jiménez, (Emilio), que vivía en frente en una hermosa casa de galería, que para la misma época fabricó y que después vendió a don Víctor F.
Thomén (hasta que hace poco estuvo en ella la Sede del Obispado). Martínez Reyna, se destacaba por épocas diferentes unas veces por su quehacer intelectual y como poeta de fino estro y otras veces por su actividad
política y su participación en sangrientos combates durante las guerras civiles, militando por el jimenismo o "Partido Bolo o Azul" en pequeñas y grandes campañas. Ya en la segunda década, durante la
Revolución de 1912 fue herido gravemente en la batalla de "Carrera de Palmas", entre la Sabana de río verde y las vertientes del Santo Cerro, en la provincia de la Vega, herida de bala que lesionó uno de sus
pulmones y de la que padeció después por el resto de su vida; pero así como era delicado en la inspiración del verso era recio y fuerte, carácter; y vehemente para las empresas durante algunos años en el período de la
ocupación americana después de 1916, estableció un comercio de Mercancías y provisiones en el callejón Ex-Convento. Pero cuando a consecuencia del plan Huges-Peynado comenzaron a reorganizarse los partidos, se adelantó
a sus tradicionales enemigos políticos rojos, o los "rabuses" del Concho Primo, a quienes había
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combatido de por vida, haciéndose primero que ninguno de los
touanten tradicionales del Horacismo, Director de la Campaña reorganizativa del mismo; se hizo fuerte en esta nueva línea y con el nombre del partido Nacional ganó las elecciones generales ordinarias de 1924; con lo que
fue su líder máximo en Santiago y gran parte del Cibao hasta 1930, cuando cayó ese régimen. En la trágica noche feroz en que se estinguió su vida a fuego y sangre entre las manos de sus enemigos. padecía de fiebre; y se
hallaba en cama por el recrudecimiento de la enfermedad que le originó la vieja herida del 1912. e) Toda la producción literaria de Martínez Reyna está diseminada en periódicos y revistas de su tiempo. Nosotros
conservamos la siguiente poesía con que él se dignó honrar el primer número de MUNDO ANTILLANO, una Revista de Arte, Ciencia y Letras, propiedad y dirección del Autor de este volumen, publicada en 1916 (editadas en la
Imprenta de don Ulises Fco. Bídó):
VUELO DE AGUILAS
Hai dos almas que cruzan el espacio Como dos grandes águilas: Policarpa, la hija de Colombia, I Trinidad, la heroica quisqueyana.
En esta hora en que el dolor abruma A la gloriosa tierra americana, En el seno del trópico, Como huracán que pasa, Oyen, llenos de asombros, nuestros montes el batir de sus alas.
Y es porque él se parece Al ruido singular de las batallas en las grandes llanura:, en las altas montaña: Libraron las legiones de Bollar Para crear la patria Americana
Hai dos almas que cruzan el espacio Como dos grandes águilas. . . Cantaremos un himno? Acaso alegre diana? Ante el trazo de la luz que va dejando Por la esfera sin manchas.
Que vio ayer, jubilosa, a la Victoria
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Correr sobre su carro, soberana, De volcán en volcán, de cumbre en cumbre En estas tierra santas Donde la Libertad prendió en el pueblo
Con raíz milenaria. . .?
En esta hora en que el dolor abruma la gloriosa tierra americana Sólo del corazón i de los bosques El silencio se alza . Virgilio Martínez Reina
(De Mundo Antillano. No. 1 Pág. 18. Revista de Artes, Ciencias y Letra & de Pedro R. Batista C.) (Septiembre de 1916. (Bajo la Ocupación Norteamericana)
33.- Por "San Juan" estaban los Martínez
Reyna, (Carolina); los Mainardi Reyna (Rafael); y otros; con las que se completaba esta quinta manzana del Grupo B.
34.- En la sexta manzana, desde la acera Oeste "San Juan" y por "Las Rosas", "San Antonio" y "La Barranca". a) Por "San Juan", los Pizano, (Manolo); los Fernández,
(Manuel), alto empleado del Bazar Parisien); los Moya, (Nicolás); los Ramírez, (Rafaela, quienes se ausentaron para Cuba, y no regresaron jamás); los Paulino Petitón, (Juan Bautista); los Gómez L. (Narciso, Oficial de
la Guardia República); y los Almonte Jiménez, (Emilio); b) Por "Las Rosas", los Muñoz, varios solares, los Sosa, (Gral. Nini); y su Taller de Ebanistería, los Tavarez (Froilán); Eudoro Canó Soné, de la
Sociedad de Azua. c) Por "La Barranca", los López, (Juan María); los Fernández, (Amelia); los Rodríguez (Valeriano); 35.- En la séptima manzana, los Cantinazo, (Genaro); los Segura, (Luis);
36.- En la octava manzana, el Asilo Santa Ana (Calle "Las Rosas" con Colón) 37.- En la novena manzana, los Viñals, (Pancholo); los Minaya, (Joaquín); en el extremo Oeste calle "Las Rosas". 38 -
GRUPO "C" (continuación del Cuarto Cuartel); Todas las manzanas comprendidas entre las calles "San Luís" y
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hacia el Oeste, entre "Las Rosas" y el callejón Ex Convento; 39.- Primera manzana: a) Por la calle "San Luis", con solamente dos casas entre un largo solar: los Amarante Valverde, en la
esquina del Noroeste frente al Tribunal y los Siverio, (Domingo) en el ángulo Suroeste, frente al Cable francés. b) Por el callejón Ex Convento: el Alambique de los sucesores de Joaquín Beltrán; y los Beltrán Viñals,
en su residencia de dos plantas, ya para final de la década una Clínica del Dr. Emilio Ginebra; c) Por "Cuesta Blanca" la Licorería "Hijos de Beltrán" fabricantes de rones ("Beltrán") y
Almacén de vinos españoles; y un largo solar ocupando todo el resto de esta calle y casi todo el lado de la calle "Las Rosas", con algunos ranchos, hasta cerrar con los Amarante. (Supra letra a) Por casi
toda la década estuvieron depositados en este solar varios grandes pailones de hierro, de aproximada capacidad de un metro cúbico cada uno, aparentemente desechados del antiguo Alambique de Beltrán, (productores del Ron
del mismo nombre, afamado por José Martí al poner pie por primera vez, en territorio dominicano el 10 de Septiembre de 1892, y pernoctar esa noche en la Finca "La Reforma" del General Máximo Gómez. "Los
bohíos se encendieron; entró a la casa carga ligera; pronto cubrió la mesa el plátano, y el lomo, y un café' de hospedaje, y un fondo de Ron bueno de Beltrán;.." (Martí en Santo Domingo, por el Dr. Max Henríquez
Ureña, de CLIO, No. 95, pág. 31, Conferencia del Ciclo organizado sobre Temas de Historia de Cuba, por la Sociedad de Conferencias,
Pero este solar tiene también su historia existía allí hacia mediados del siglo
pasado, la rica casa comercial de don Francisco un santiagués de ascendencia catalana, partidario de la Restauración.Sus oficinas se convirtieron en un centro conspirativo donde se reunían para fomentar la Revolución
los distinguidos ciudadanos Ulises Francisco Espaillat, Pedro Francisco Bonó, Benigno Filomeno de Rojas; Gral. Remigio Batista, Miguel A. Román, Domingo Rodríguez, y otros que prestaron su decidido concurso para la
guerra contra el poder español. El historiador don Pedro Ma. Archambault (Historia de la Restauración, la librairie Technique et Economique, 3 rae Sufflot, París V. pág. 56) refiere un hecho "insignificante en
si, trayendo como 58 Pedro R. Batista C.
secuela una multitud de consecuencias de la mayor gravedad para precipitar la Revolución"..."preparándose para una parada militar, el Comandante Gral. Buceta
mandé a su ayudante a comprar un par de guantes en la tienda de Viñals". "Poco después' volvió el ayudante devolviendo los guantes sucios y deformados, diciendo que el General no los quería porque le estaban
estrechos, que se los cambiara, cosa que no consintió el dependiente" (un sobrino del Gral. Santiago Rodríguez, a la sazón en Haití tramando la Revolución)... tres idas y venidas entre la tienda y la Fortaleza, el
ayudante al fin regreso... "con un mandado grosero y autoritario" al cual le reiteré entonces personalmente, el propio don Francisco Viñals: "Dígale al comandante que yo no recibo esos guantes y que
compre otro y, "pasando a poco el comandante general en la parada, le voceé a don Pancholo (señor Viñals) "Me la vas a pagar, te voy a botar del pueblo, leproso! ; "Yo soy que lo voy a botar a Ud."
le replicó Viñals. Devino esta cuestión el chisme del día; no se hablaba de otra cosa; había un motivo mis para murmurar del despotismo del comandante general Buceta y la indignación popular prendía como un incendio
en el volcán del insulto y del atropello de un pueblo injustamente flagelado por un tiranuelo extranjero". "Desde ese momento la prestigiosa casa de Viñals fue el centro de la conspiración," refiere el
historiador Archambault.
40.- Segunda manzana: Tienda de cigarros de "La Matilde" bajo la gerencia de Fello López; edificio de dos plantas de la Fábrica de Tabacos "La Matilde" de Simeón
Mencía; una construcción notable en la época y tenida como de las más bellas por su arquitectura; seguianle una Botica del Dr. Báez Lavastida (Supra No. 29-b) y una casa de Comercio de Cristóbal Perelló, consumida por
un incendio, en la esquina "Las Rosas" en "Comercio"; y por esta calle Comercio de Aquiles Bermúdez, (fallecido súbitamente); los Almacenes y tiendas de Nicolás Vega; y una ranchería por el callejón
Ex convento, con una fragua, la Fonda de Doña Blasina y otros negocios; 41.- Tercera manzana: a) Por la calle "Comercio", la casa Pastoriza (Tomás, importadora y exportadora) Almacén y Tienda de Julio Díaz
y luego después de Ramón Eugenio Alvarez, (mercancía gruesa, alistado "Albama", Algodón tramado "W J"; purcianas moradas, de manufactura inglesa; fuerte azul "Pearl River"; pañuelos de
madrás a cuadros de colores- palios con que las señoras del pueblo solían amarrarse la cabeza, y que acompañados de buena manta
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negra bordeada de flecos constituía adecuada vestimenta para la ciudad). b) Por "Las Rosas" la Fábrica de Sombreros de Manuel Antuña; los Almacenes de tabaco en rama, clasificación, empaque y enceronamiento
de la casa Pastoriza; y el Restaurante de Gil Pepín haciendo esquina con un callejoncito o pasaje titulado "de Mencía" por haber sido dejado segregado de su propiedad por don Simeón Mencía para dar fácil
acceso al Callejón del Mercado; seguíale la elegante casa de galería, residencia de esta familia (Mencía Lora) (fabricada raramente en su tiempo con un bello estilo que algunos dicen "Victoriano" que
sobresalía de lo común; (infra No. 85 d y e) y aun entre otras pocas de variadas formas arquitecturales, como lo eran el edificio de "La Matilde", fábrica de tabacos del propio don Simeón Mencía; la segunda
planta de madera del Tribunal de Justicia, ambas en la misma calle "Las Rosas": la residencia de don José de Js. Alvarez en la calle "Comercio", la residencia de José Ml. Batlle y la de Batlle Viñas
en la calle "Sol"; doña Felicia Julia Vda. Espaillat en la calle "San Luis" y otras.
Seguianle, los Vega Llenas (Amalia Vda.); los Arteaux Vega (Carlos de la gerencia del cable francés que
pronto se trasladaron a Puerto Plata y después a la Habana, Cuba; Fello Vega y un pasaje hacia el callejón exconvento segregado a su propiedad, y que se cerraba cada vez "antes del año y un día" para conservar
la posesión del mismo de parte de la Sucesión Vega Llenas; una casa de galería, en construcción, propiedad del Dr. Fonts Sterling, sobre bases de concreto o cemento armado, (una de las primeras construcciones de ese
tipo iniciadas en la ciudad); los Petitón, (doña Bobola, en una casita en el fondo del solar, enverjado en el frente; los Guerrero Mallol, (Wenceslao); y el café del Yaque de Wenceslao Guerrero, Laíto, (billares,
dómino, malilla, y temporada de bailes populares durante el carnaval, cada año. Este vino a ser después el famoso Café del Yaque de los señores Magurno y Totono y sucesivamente de Bruno Figgliúzi, de José Riggio,
padre e hijo dueño después este último del Hotel Mercedes, todos italianos de maneras distinguidas que arraigaron pronto en la comunidad,
c) Por el Callejón, Julio Saleta, administrador de Lotería; la Botica de don Pablo Smester, que fue luego de don 60 Pedro R. Batista
Emiliano Bergés, venido de San Fco. de Macorís y residente en
la calle "Comercio"; Pulpería de Luis Caballero; Comercio de Emiliano Alba, (tienda de artesanales, macutos, escobas, cerones, aparejos, esteras, canastos, pulpería y billetes de lotería); Juan Ma. Alba
(tienda de mercancía en general); salida del pasaje de Mencía; Chicre José Sued, (mercaderías, tráfico de armas-revólveres 12, 38, cápsulas, correas, cananas, artículos de cuero, polainas, sillas de montar, frenos,
bridas); Pedro A. Jorge, (mercaderías y provisiones); Manuel A. Batista C., 'Mocho" comerciante en telas y mercancías gruesas (algodones, tramado "WJ", "Indio" y otros tejidos de mucha fama
entonces; Listado de Alabama; Fuerte Azul "Pearl River"; lonas y lanillas para toldos, forro de' castre, hamaca y batidores; "Calzapollos" (zapato universal del labriego cibaeño, fabricado de lona
con contra fuertes, punteras, ojales y zuela de cuero cuyas dos principales fábricas eran la de don Felix García en la calle "Libertad" y don Salomón Hued, en el callejón del "Mercado"; purcianas
inglesas, purcianas moradas y pañuelos de madrás para la típica vestimenta de las señoras de los labriegos; Sombreros "Borsalinos" toda esta y muchas otras mercancías desaparecidas del Mercado y las
manufacturas de la vida moderna, por lo cual nos hemos detenido en nombrarlas; Manuel A. Valverde (Manolo) mercancía gruesa; y la Casa Pastoriza (importadora de mercaderías, provisiones, etc. y exportadora de tabaco,
ceras, cueros, café, cacao y frutos del país); 42.- Grupo D. del Cuarto cuartel- Todas las manzanas desde la calle "San Luis" hasta el parque Central.
43.- Primera manzana Por "El Sol", casa de dos plantas residencia y consultorio del Dr. Pedro Pablo Dobal (Supra 29-b), la antigua residencia de nuestros abuelos maternos el General Ricardo Curiel y doña
Justa María Rodríguez, próceres entre los más activos en la conducción de la campana y de la guerra de la Restauración Nacional.
Con don Ulises Fco. Espaillat, don Ramón Matías Mella, don Benigno Filomeno de
Rojas, don Máximo Grullón, don Pablo Pujols, don José Ml. Glass, don Julián Belisario Curiel, y demás notables forjadores de la República del 63 figuró en las Comisiones de Guerra, de Hacienda u otras; en la formación
del Primer Gobierno; en la formulación del Acta
Santiago a principio de siglo 61
de la Independencia del 14 de Septiembre del mismo año; y refrendó las principales Decretos por las cuales a): se declaró al
General Pedro Santana, contra quien iba a batirse el Gral. Luperón en la Guerra decisiva del Este, "fuera de ley" y por consiguiente "sujeto a que todo Jefe le tropa que le apresare, reconocida su
identidad le hiciera pasar por las armas"; b) el que declaraba la guerra par mar y tierra contra la monarquía Española; c) el que mandaba a los jefes de operaciones que al entrar en campaña hicieran el mayor número
de prisioneros y los trataran con humanidad, particularmente a los heridos, mientras el enemigo no obligare a usar de represalias; d) el que llamaba a las armas a todo dominicano apto para la guerra; e) el que incitaba
a las regiones del país que todavía al 27 de diciembre de 1863 contemplaban la trágica lucha por la Independencia, temerosos de que triunfaran los Españoles; f) las llamamientos a los Venezolanos, Granadinos y Peruanos;
Ecuatorianas y Chilenos y demás pueblos hermanos de América; al Presidente de Haití, etc. para que cooperaran con la causa dominicana; y otras. Formó parte en las negociaciones con el delegado del poder militar español
el Presbítero Francisco Charboneau; y en la Convención de El Carmelo, y personalmente ante el propio General La Gándara, en la ciudad de Monte Cristy, para la rendición de las armas españolas. Pasada la guerra de la
Restauración fue siempre activo en la política de su tiempo; ministro de varias carteras y como Ministro de Hacienda en una de las administraciones del Presidente Buenaventura Báez, le tocó suscribir con el Sr. Edward
H. Hartmont, representante de la Compañía Londinense del mismo nombre el Empréstito del 1 de mayo de 1869. Durante su larga vida pública fue Defensor Público (abogado), Juez de Primera Instancia, Procurador Fiscal,
Comandante de Armas, Miembro de Comisiones Públicas, etc. etc. Falleció en Santo Domingo y reposan sus restos en el Cementerio de la Ave. Independencia, en la tumba de don Gerardo Jansen erigida en memoria de este
último por el Ayuntamiento de Santo Domingo.
Seguianle los Curiel Muñoz, (Sinforosa Viuda, y los Lluberes Curiel (Manuel de Js.); los Marchena, (Benjamín y Jacobo, casa de comercio, (muebles extranjeros,
como side-boards, armarios, espejos ornamentales de lunas biceladas y de cuerpo entero, lámparas de pié y colgantes con lágrimas de cristal; camas dobles de metales dorados y cuatro barrotes para cielo raso, alfombras,
tocadores de madera y mármol; cortinas de damasco, cristalería de bohemia y loza china, y otras ya en desuso aunque de encumbrante lujo, desaparecidas en el moderno comercio; seguíale "El Aguila de oro" de
Pablo Cabral y Báez, hasta cerrar la manzana; por la "Cuesta Blanca" las Barranco y la antigua residencia de Ana
62 Pedro R. Batista C.
Luisa Tejera; por Exconvento, los Julia, (J.J.) los Zéller, Calín y Emilio;
Los Pastoriza Valverde, (Tomás- Don Chichí) un chalet de dos plantas, y de graciosas líneas arquitectónicas, remedando las
construcciones suizas".Uno de sus mayores hijos, don Andrés Pastoriza, figuró en el alto comercio de Santiago, en la propia casa Pastoriza y después como accionista del Bazar Parisién de Augusto Espaillat Sucs. de
la que su esposa Doña Matilde era también miembro de familia y accionista; en 1924 habiendo dirigido y patrocinado la Candidatura del Dr. Fco. J. Peynado en la Coalición Patriótica de Ciudadanos de la que fue su
Tesorero en Santiago, y habiendo ganado las Elecciones el Partido Contrario que lidereaba el Gral. Horacio Vázquez y como aliado el Lic. Federico Velázquez Hernández Director del Partido Progresista, el nuevo Gobierno
recabó de él su cooperación como ciudadano.Desempeñó entonces la Secretaría de Estado de Fomento y Comunicaciones con sentido práctico, capacidad y alta visión de futuro.Fue de los primeros en resaltar el valor del
tesoro histórico que representaban nuestras ruinas coloniales preocupado por su conservación y restauración. Abrazó después la vida diplomática y fue uno de los representantes de la República en la Casa Blanca durante
la Presidencia de Franklin Delano Roosewelt de mayor y fecunda labor para su país; (Nos recuerda este chalet de Pastoriza un hecho de vida ocurrido en cierta época en el curso de aquellos años. En él vivió poco después
que la familia Pastoriza se trasladó a una nueva residencia en la calle "Sol" alta, un grupo de jóvenes alemanes empleados de la Litografía de La Habanera y falleció uno de ellos durante una corta epidemia de
tifoidea que cobró varias víctimas; entre ellas, en un solo día, nuestra vecina en la calle "Las Rosas" señorita Eugenia Ricardo Román (Gena) y un extranjero hospedado en el Hotel de Laito Guerrero (Hotel
Central) en la misma calle, así como tres muchachas avecindadas en la parte baja de la ciudad, con la consiguiente alarma y pánico en la Ciudad. Parece que la enfermedad no se conocía bien y se la trataba
inadecuadamente. Tal vez la ausencia de laboratorio de prueba o el desconocimiento de su carácter infeccioso impedía un acertado diagnóstico de la fiebre tenida por algunos como de carácter palúdico, a pesar de su
carácter más grave y contagioso. Más tarde, comenzó a hablarse de un proceso infeccioso que se realizaba en los intestinos durante el periodo de incubación de las bacterias que lo producían; y de los caracteres
sintomáticos propios y diferente de aquellos de la fiebre palúdica; dejó de administrarse la clásica píldora de quinina "Pelletier" y comenzaron a aplicarse baños de hielo para bajar la fiebre y se abrieron en
fin los caminos hacia un mejor conocimiento de la enfermedad y su adecuado tratamiento.
Santiago a principio de siglo 63
Este no era un problema solamente local sino de carácter más o menos general y que
afectaba a otras Naciones mas adelantadas; no solamente a la profesión médica y a la salud de Santiago y del pueblo dominicano. Se sabe que fue todavía más tarde, cuando la enfermedad pudo determinarse desde sus
comienzos a causa de los trabajos de laboratorios; establecerse medidas preventivas; disminuir su carácter grave y el índice de su mortalidad con la aparición de los antibióticos y los progresos de laboratorios. A pesar
de que los señores facultativos de aquella época prescribían con el léxico propio de la farmacopea. Incomprensible para la masa de población, y de que en consultas de Juntas de Médicos que eran entonces muy frecuentes a
la cabecera de los enfermos graves, los galenos se entendían en lengua francesa; había luego completa accesibilidad a la confianza del médico, que se complacía en explicar en detalle muchas cosas acerca de las
enfermedades y de los enfermos. La profesión no era ejercida en el coto cerrado en que la ejercen muchos, lo que, juntamente con la abundancia de Literatura Médica y Farmacéutica circulante en Revistas médicas,
almanaques, etc. propendía a la divulgación de muchos conocimientos provechosos a los profanos de la ciencia de la salud. Los Patentizados traían prospectos para que los leyeran todos. La extravagante comercialización
de las profesiones médica y farmacéutica modernamente en combinación con los laboratorios han suprimido esta practica)
Se terminaba esta primera manzana del GRUPO D con las residencias por la calle "San
Luis" de las familias de doña Leocadia Viuda Valverde, tronco de larga familia y los Moya Valverde, (Enriqueta Vda.). 44.- En la segunda manzana doña Gumercinda Malagón Vda. Glass (Supra 43) (casa de dos plantas
contigua a la esquina con el "Sol" y Almacén de la esquina de una sola planta; la tienda de calzados americanos de Enrique Pou, especializado en acreditadas marcas que aun perduran en algunas tiendas en New
York; el establecimiento de Leopoldo Malagón; "La Farmacia" San Rafael fundada a fines de la década por J. F. Batlle; los Almacenes y tienda de J. M. Batlle Sucs. por ambos lados de las calles "Sol"
y "Comercio";establecimiento de Pedro Guzmán e Hijos los Campagña Hermanos; Vicente Ancellotty, en la esquina "Ex-Convento" y por esta calle hasta Duarte otra vez, otros diversos comercios; pero
había hacia la mitad de la cuadra un solar donde existía un rancho con la Fonda de Blasina, apretujado de comensales desde tempranas horas cada día, y donde
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pernoctaban familias campesinas en su mayor parte. 45.- En la Tercera Manzana el Mercado público, cuyos lados Este y Norte, lo constituían como hoy, edificios de comercio. Los otros dos lados poseían un enverjado de
listones de madera entre gruesas columnatas de mampostería. En los indicados lados Este y Norte, correspondientes a las calles "Comercio" y "Sol", estaban los establecimientos de José Vega Llenas
(Chepe); "Las Tres B" de Antonio Haché; los Hermanos Zouain (Simón, Jorge y Emilio); los Hadad; y otros; por dentro el mercado tenía edificaciones de madera, techados de Zinc destinadas a las Carnicerías,
lechería, cocinas, quincallerías, y una platería (de Mota y también Machimbo). a) El mercado abría sus puertas a la 1 de la madrugada, cuando comenzaban a trabajar los picadores de carne, que la dividían por
"pesadas" de dos, tres, y cuatro libras y las colgaban de los ventanales de las casillas para el expendio.Antes del amanecer de cada día ya la universalidad de los negocios del mercado estaba en plena
actividad. En febrero de 1912 un gran incendio destruyó el Mercado y parte de las tiendas de Comercio arriba indicadas. Entonces se reconstruyó con un enverjado de hierro. En su interior una ancha galería corrida por
los cuatro lados y dividida en el lado Este en Carnicerías, cocinas, lechería y otros negocios, alojaba las mesas y puestos de Quincallería, mientras el extenso cuadrilátero del Centro tenía mesas a la intemperie que
arrendaban los vendedores de frutas, legumbres, víveres y demás cosas de los mercados,- Una tercera reconstrucción del mercado, es la que actualmente tiene. b) En la primera década del siglo, el ayuntamiento tenía un
Encargado, Administrador o Arrendatario del mercado en la persona de don Domingo Garris, un respetable caballero de edad avanzada pero muy dinámico de ascendencia española; formó familia en Santiago, siendo una de sus
hijas casada con don Leopoldo Franco Bidó de cuyo matrimonio derivan los Franco Sagredo; los Alberti Franco y otros, Don Domingo está enterrado en la nave lateral izquierda de la Iglesia parroquial Mayor.
c) Don Domingo Garris también dirigía el servicio de alumbrado Público, y con un pequeño tren de empleados
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daba eficiente servicio a la ciudad, (infra No. 89). Cada
mañanita, los madrugadores "faroleros" de Santiago, con una escalerilla al hombro y a paso muy ligero subían y bajaban junto a los postes para apagar el alumbrado. A eso de las 10 de la mañana emprendían de
nuevo la tarea, esta vez para recortar las mechas, limpiar las vidrieras de los faroles y los tubos de las lámparas y llenarlas de gas kerosen; y una tercera vez al anochecer para encender el alumbrado de cada noche.
Los Faroles lo más que alumbraban era un pequeño radio de 20 metros, favorecida la luz por el manto pavorosamente negro de las noches del novilunio. Para las pupilas deslumbradas por la intensa luz eléctrica de hoy,
aquellos faroles no alumbrarían casi nada a su derredor. d) Antes de que terminara la década, el Ayuntamiento mejoró el alumbrado público primero con lámparas de mantel (asbeto) una luz muy brillante y de triple o
cuádruple intensidad a la que producían las lámparas de Kerosén. Más tarde, todavía, los faroles de los Parques tenían luz de acetileno. 46.- En la cuarta manzana: a) Por el Sol desde el callejón del Mercado la
Ferretería en liquidación de William Palmer; establecimiento de Jacobo Sahdalá; la casa de comercio y residencia de Baduit M. Dumit; la "Villa de París" de Rafael J. Espaillat, (artículos de lujo según el uso
de la época, como los descritos en la tienda de los Marchena); una casa de dos plantas que ocupó luego el Hotel Garibaldi. La Botica de los Pobres, del Lic. Julio de Peña, a cuya puerta se podía llamar a cualesquiera
hora de la noche, bien surtida y con recetario completo; los Peña Bordas, (Lic. Julio de): la Iglesia de N. Sra. del Carmen, (construcción de ladrillos, de altas paredes, techada de zinc, con alto campanario
cuadrangular en el frente de la Puerta Mayor hacia el lado del Parque Central y tres naves; correspondientes, la del centro a la patrona, y las laterales, una al Nazareno y otra a la virgen con el niño. Muy ligada a
la tradición religiosa de Santiago y de larga historia, donde reposaban bajo una serie de lápidas esculpidas en mármoles con sus nombres, las sepulturas de muchas familias antiguas y de vinculación con la Historia. Fue
vendida a particulares poco después de mediados del presente siglo y demolida con gran pena para muchos Había en la
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El Parque Central mostrando uno de los faroles de gas (Kerosen) de su alumbrado primitivo. Parcialmente oculta, una farola nueva, de transición en el cambio de alumbrado ya avanzada la década.
Facilitada por el Director General del Archivo Historico de Santiago don Román Franco F. esta foto muestra el retorno a la ciudad desde Nibaje, de la comitiva y parte del
pueblo que asistió a la inaguració de la Planta Eléctrica en 1915. Muestra el Aserradero y el Río, desaparecida ya por las crecientes la isleta que se ve en otra foto (La Portada).
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nave derecha una estatua en bronce de la Virgen con el niño, ambos coronados, que luego fue empotrada en lo alto
de la fachada del lado Oeste de la Iglesia Mayor de donde parece haber sido también removida a un lugar ignorado;
b) Junto al callejoncito de esta Iglesia estaba el Club Santiago; y ambos solares, iglesia y club, están ocupados hoy
por el edificio del Banco de Nova Scotia ("30 de Marzo" y "Sol"; en la esquina del exconvento, Zula Esperanza y los hijos de Pachú Lora;
c) y por el Callejón, diversos comercios, entre ellos la casa de los Primos Eulogio y Vicente Vázquez, (establecimiento de provisiones en la categoría que tienen hoy los supermercados y único en su género en toda la
ciudad, los demás eran pulperías, desde luego bien surtidas, pero de menor categoría, para barrios); seguíanle
solares, y un rancho techado de yaguas, con la Fonda de un Chino, donde, una de sus hijas se vió conminada un día, a la hora meridiana, a darle una cuchillada a un mal cliente.
d) Seguíale, la residencia de los Patxot Muñoz, (Pedro) casa de dos plantas, con la familia y taller de alta costura
de Clementina Patxot y Chea Moreno en los altos; y en los bajos, hasta cerrar por el callejón el establecimiento
comercial (mercaderías); los Sahdalá; los Sued, (Abraham, tienda y fábrica de zapatos de lona y cuero; hasta la casa Palmer;) 47.- Quinta manzana (continuación del mismo GRUPO D del cuarto cuartel)
El Parque Central, antigua Plaza de Armas: Con los mismos paseos, pero mucho más estrechos que los ampliados que tiene hoy. Poseía cuatro Fuentes ornamentales, provistas de estatuitas de Angeles y Cisnes, en cuyos picos
estaban los surtidores del agua proveniente de un tanque elevado en el patio de la casa de don Abelardo Viñas,
contigua a la Gobernación. La Fuente del paseo diagonal del Sureste fue cambiada por la columna Conmemorativa de la Restauración que allí existe todavía, construida por el arquitecto Menicuci en 1917 por mandato del
Gobernador provincial Lic. Ml. A. Lora y sufragada con la asignación del Gobierno Militar para la celebración de la efemérides del 16 de Agosto. Las otras tres Fuentes han sido quitadas.
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a) En el centro del Parque, la Glorieta era de madera, de dos plantas; arriba para los Conciertos de la Banda
Municipal y del Ejército Nacional en las noches de Jueves y Domingos (Retretas); y en los bajos, un Restaurant y
Frutería del arrendatario don Rafael Marcelino, con juegos de dominó, y naipes como "burro" brica y otros, sin azar, hasta nueve y media y diez de la noche.
b) Provisto también el Parque de bancos ornamentales, con motivos florales y todas de hierro, con sus grandes y
cómodos espaldares; y además unas pilastras que sustentaban grandes copones ornamentales, de hierro, a seis o
siete pies de altura y a ambos lados de las entradas a los paseos interiores, sembrados de cariofiláceas, siempre florecidas en diversos colores y bien atendidas.
c)La distinguida dama doña Idalia de Espaillat sembró los árboles de grandes ramajes (zamanes), hacia el lado de
la calle"30 de Marzo"(uno de ellos ya secándose);. don Vicente Tolentino (padre) sembró todos los árboles de
frijolitos, a excepción de los dos nuevos frente al Centro de Recreo, provistos por la finca de don Polín Franco Bidó Garris y sembrados por nosotros desde la Sindicatura Municipal que desempeñábamos entonces (1951);
Lo más nuevos arbolitos de "frijolito" sembrados en el Parque Duarte Santiago, por propias manos del Síndico Municipal Lic. Pedro R. Batista C. durante su ejercicio a
mitad del siglo (1951). Extraídos de la cima de una alto cerro de la finca de don Leopoldo Franco Bidó (Polín) y trasplantado por el personal de Obras Públicas
Municipales, conservando la distancia y posiciones que tenían en la cima del cerro y en la Naturaleza silvestre en que nacieron.
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d) Las verjas del Parque constituyen su detalle más simpático, su construcción se debió a la Sociedad "Progresista
del Yaque", como la construcción del Parque Colón se debió a la Sociedad "Amigos del Adelanto"; y ambos
Parques fueron diseñados y terminados bajo un mismo patrón ornamental y arquitectónico, que se debería respetar
siquiera por agradecida recordación a aquellos que lo construyeron con amor y devoción cívica para este pueblo.
e) Las actividades sociales, culturales, políticas y cuanto en los primeros años del presente siglo representó
palpitación de vida y quehacer fructífero para la comunidad Santiaguesa difícilmente las hallarán desvinculadas del
ambiente de este Parque, el principal desde los días mismos de su construcción. Arengas y todo género de oratoria tuvieron sus tribunas en él.
f) No faltaron tampoco los conciertos de cada Jueves y Domingo, por las Bandas de música del Ayuntamiento y del Ejército, ni aun en tiempos difíciles; al extremo que ya en la segunda década, curiosamente en las semanas
próximas al establecimiento del Sitio de la ciudad por la formidable revolución de 1914, una guerrilla penetró a la
parte baja de la ciudad y disparó airada una ráfaga, conocida entonces por el vulgo con el mote de "asesinaron la retreta".
De esta bárbara inrrupción resultó lesionado con un rasguño en la cabeza don Pedro Espaillat quien se hallaba a la ocasión en la galería del Club Santiago en la calle "30 de Marzo".
g) En este parque se dio a conocer en Santiago nuestro Himno Nacional; y hacia 1903 en las Retretas se tocaban este el 27 de Febrero y el Himno de la Restauración también llamado Himno de Capotillo, el 16 de Agosto.
h) El Himno Capotillo canta la jornada iniciada con el grito de guerra de la Restauración, (letra del poeta Manuel Rodríguez Objio y música de Martí Calderón escrito por ambos, a instancias del Gral. Gregorio Luperón).
Calderón, nacido en Puerto Rico fue músico del Ejército Español bajo las órdenes del General Primo de Rivera y a
raíz de la muerte del presidente Heureaux, se había establecido en Puerto Plata, donde enseñaba música y gozaba
de mucha estimación; y puso nuevamente entusiasmo por el mismo, que pronto contagió a las gentes de Santiago. La siguiente estrofa es parte de la letra de dicho Himno: "Capotillo es el grito sonoro
que se debe elevar por doquier Que al salvar nuestro Patrio Decoro Protestamos morir o vencer"
i) Por entonces también se recordaba y quería revivirse para las retretas del 16 de Agosto, una pieza musical que era fama que había sido tocada con desbordante entusiasmo por el pueblo en las fiestas
70 Pedro R. Batista C. inaugúrales del Ferrocarril (1897): La "Batalla de los Castilleios" (una composición musical que imitaba los
episodios de la Batalla de ese nombre, entre españoles y marroquíes por medio de cometas, clarines y baterías y
que con mayor realismo iba acompañada de artillería de montaña y tiros de fusilería, que recordaban el papel que desempeñaron en dicha batalla (1859-1860) los húsares del Príncipe (soldados de caballería).
Este espectáculo musical y bélico parece haberlo introducido en Santiago la guarnición española de los días de la
anexión para halagar la vanidad de los generales y políticos de España don Leopoldo O'Dennell y don Juan Prim y
Prats, el primero, a la sazón Presidente del Consejo de Ministros y el segundo, participante en la gran victoria de
los Castillejos (1859) un lugar en la costa Norte de Marruecos, cerca de Ceuta y que le valió el titulo de Marquéz de los Castillejos, bajo la Reyna Isabel.
Fue así que cada vez que se aproximaba la efemérides de nuestro 16 de Agosto, corría como bola de nieve el
anuncio de que se reviviría y se tocaría en medio de la simulación de una batalla, dicha pieza musical... que nunca se tocó después.
j) Aunque, perteneciente ya a la segunda década (1913), otro grandioso evento en este Parque Central lo constituyó el acto de inauguración del Acueducto, Planta y Alumbrado Eléctrico de Santiago, en la cual las
Señoritas Jeanne Bogaert y María Asencio, pronunciaron EL HAGASE LA LUZ! . .. y oprimieron el botón por el cual LA LUZ FUE HECHA
k) La Banda de Música bajo la dirección de los Maestros Ramón Emilio Peralta y José Ovidio García llegó a su
mayor apogeo durante las dos primeras décadas del siglo. Era una Banda completa con los mejores instrumentales.
Sonaba con la limpieza de una orquesta Sinfónica cuando interpretaba pasajes o trozos de esa, y otras formas musicales. La mayoría de sus componentes han sido nuestros grandes maestros de los años posteriores y del
presente. Los músicos se formaban en su Academia. Los programas de las Retretas se publicaban en la prensa e
incluían arias instrumentales de todas las óperas, música de los grandes Maestros, oberturas, trozos sinfónicos, partituras de operas famosas, operetas y todas las formas musicales.
Mucho público concurría "a escuchar las Retretas" vehículos de difusión de la cultura musical. 48.- En la subsiguiente manzana, el Club de Damas ocupaba una casa de mampostería de una planta cuyo aspecto
exterior, de azotea, era como el de un
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